Bahía Solano, Chocó
Iniciativas con Balance Positivo (IBP) transforman la vida de comunidades afectadas por el conflicto armado en Bahía Solano, Chocó.
En un rincón remoto de Colombia, donde la naturaleza exuberante se encuentra con una rica herencia cultural, la comunidad del Resguardo Indígena Río Valle y Boroboro ha demostrado una increíble resiliencia y determinación en su lucha por recuperar su autoprotección y su invaluable cultura. A través de la metodología de innovación social conocida como Iniciativas con Balance Positivo (IBP), esta comunidad ha logrado un renacimiento que merece ser aplaudido.
Renaciendo desde las cenizas
Durante años, estas comunidades se vieron afectadas por el conflicto armado que sacudió la región. Pero en lugar de ceder ante la adversidad, optaron por la unidad, la autogestión y el empoderamiento como vías hacia su recuperación. La implementación de las IBP ha sido un paso crucial en este viaje hacia la renovación.
Fortaleciendo la autoprotección
Uno de los logros más notables de este proceso ha sido el fortalecimiento de su capacidad de autoprotección. A través de capacitaciones dirigidas a las autoridades indígenas y la dotación de recursos para su guardia, han mejorado su capacidad para proteger tanto su territorio como sus comunidades. Esta medida no solo garantiza su seguridad física, sino que también refuerza su sentido de unidad y pertenencia.
Preservando una cultura ancestral
La cultura indígena es una joya invaluable que merece ser preservada. En este sentido, las comunidades del Resguardo Río Valle y Boroboro han promovido el diálogo intercultural y la transmisión de conocimientos para salvaguardar su territorio y fomentar la cohesión comunitaria. Este enfoque ha fortalecido su identidad cultural y su capacidad de resistencia, con especial atención a la preservación de su lengua y valores étnicos.
Educación para el futuro
La educación es la clave para el progreso, y estas comunidades lo saben bien. Han invertido en el fortalecimiento de las habilidades de sus etno-educadores, quienes ahora pueden interactuar con los niños y las niñas en su lengua materna. Además, la creación y entrega de material pedagógico en lengua tradicional ha permitido a los jóvenes aprender sobre su cultura de una manera auténtica y enriquecedora.
Por último, pero no menos importante, estas comunidades han establecido valiosos contactos con la institucionalidad y organizaciones de segundo nivel. Esto no solo les proporciona garantías de derechos, sino que también les permite compartir su experiencia y sabiduría con el mundo exterior
El Resguardo Indígena Río Valle y Boroboro es un testimonio inspirador de lo que puede lograrse cuando la comunidad se une para superar los desafíos. Su historia es una lección de resiliencia, preservación cultural y esperanza. Están escribiendo, gracias a la IBP implementada, un nuevo capítulo en su historia.